Hola amigas y amigos, esta vez en vez de hablar de los pedales, es el turno para los esquís, para el deporte rey de la montaña, el cual hemos disfrutado este puente de carnaval en la estación leridana de Boí-Taull.
El viernes comenzó la expedición desde el polideportivo de Pedrezuela, unas cuantas horas más tarde estábamos a 2000 metros, la base de la estación, alquilando el material necesario para deslizarse por la nieve al día siguiente.
Tras una reunión para comentar la organización y horarios del viaje, disfrutamos del bufete del hotel. Después de la cena hubo tiempo para jugar con los más pequeños, muy nerviosos. Para algunos de ellos ha sido la primera vez en salir de casa sin sus padres.
El sábado por la mañana, subimos a pistas para formar los grupos y dar las primeras horas de clase. Se formaron seis grupos adaptándose al nivel, tres de niños y otros tres de adultos.
Después de las clases teníamos un día por delante para esquiar bajo un sol radiante. No paramos de aplicarnos crema durante toda la jornada.
Por la tarde en el resort hubo diferentes opciones, visita al spa, juegos en el parque e incluso algún aventurero bajo hasta el pueblo de Taüll.
El segundo día de esquí amaneció con alguna nube que no tardó en disiparse. Los grupos que habían empezado el día anterior como debutantes, ya se enfrentaron a sus primeros remontes, y es que la estación de Boí-Taüll, ofrece una progresión con pistas verdes de gran longitud para disfrutar desde los comienzos de este deporte.
Tras acabar la jornada de esquí y bajar al hotel, nos aventuramos en una bajada a visitar la iglesia de Sant Clement, en el pueblo de Taüll. Hubo un poco de senderismo a «trochamonte» para llegar al mismo.
El último día de esquí iba a ser más corto ya que teníamos que iniciar el viaje de vuelta. Después de las clases juntamos a la mayoría de los pequeños para hacer la «penúltima bajada».
Han sido unos días intensos en los que después de las siete horas de esquí, el hotel ha sido un punto de encuentro para familias y amigos.
Quiero mandar un agradecimiento a nuestros colaborares del club esquí Carving, Jaime, Nacho y Manuel en la sombra, que han estado trabajando para atender a todas nuestras necesidades.
¡¡Nos vemos el año que viene, un saludo muy grande para tod@s!!